Todos sabíamos que los resultados de estas elecciones serían más atípicos que los de las del 2020. Al menos así lo veíamos venir muchos electores. No soy experta en ciencias políticas, no soy analista, ni algo parecido. Soy una electora que ha tenido la oportunidad, el privilegio de votar 11 veces, desde el 1984. He tenido la oportunidad de ver cómo cambian las tendencias electorales. "Que lo que sucedió en las pasadas, no lo vimos en estas o se repitió con más fuerza, etc."
- Las alianzas no son efectivas si al final del día, sólo beneficiarán a una de las partes. El partido VC fue prácticamente el cordero de sacrificio en estas elecciones al haber respaldado al PIP y el PIP, no haberles respaldado por completo. No obtuvieron escaños (Creo que hay un precinto de SJ que tal vez ganen. No estoy segura.), su figura principal no ganó la alcaldia de SJ, sus legisladores tampoco salieron electos. Tal vez por ingenuidad, tal vez a sabiendas, aún así, decidieron aliarse, lanzarse al vacío en pos de una esperanza para el país. Algo muy válido y valiente. En fin, puede que ellos votaran por los candidatos del PIP, sin embargo, estos no necesariamente votaron por los de VC. Esto lo reflejan los números. Moraleja: cuidado con quien haces a alianzas o mejor no las hagas.
- El candidato a gobernador del PIP, recogió votos "a tutiplen", de todos lados. Del PNP, del PPD, etc., etc. pero sabíamos que no sería suficiente para ganarle a la candidata del PNP. ¡Una realidad!
- Todos sabíamos que la Comisionada (hoy gobernadora electa) iba a ganar. Que recibiría la mayoría de votos y que recogería de los demás partidos su poquito también. Ahora que tendrá a su entero favor a la Legislatura, no habrá excusas como las de gobernentes anteriores para hacer buen gobierno. ¡El gobierno compartido, murió! Solo deberá trabajar con el nuevo Comisionado Residente, y espero trabajen por Puerto Rico y no por el estatus. ¡Así lo espero!
- En cuanto al PPD. También sabíamos lo que sucedería. La triste realidad de verlo ocupando un 3er. lugar, dolió mucho. No se atreva nadie a culpar solo a la alianza. Hay que analizar a un liderato que en 4 años solo pensó cada cual por su lado. Que en lugar de permanecer unidos, cada cual haló para su lado y lo desmenbraron. La avaricia politica, les ganó sobre el unterés colectivo. Hicieron pedazos al Partido y el martes recogimos esos pedazos, junto a un Jesús Manuel que, aún sabiendo lo que pasaría (sé que él sabía lo que venía) permaneció firme y continuó pidiendo "una sola cruz, debajo de la pava, en las 3 papeletas".
- Pero para el PPD, la cosa no termina ahí. Hubo perdidas grandes, pero también ganancias. Y aunque perdimos Cámara y Senado, se recuperaron alcaldías que hacía décadas no eran populares como Moca y San Sebastián y las que todos pensaban que caerían como Ponce y Mayagüez, resistieron el ventarón y prevalecieron. Pero eso no es todo. La ganancia más importante: ha nacido un nuevo líder dentro del PPD y se llama Pablo José Hernández Rivera. ¡El nieto de Cuchín! Quien obtuvo el favor del pueblo sacando más votos que la gobernadora electa. Por él votó "medio mundo". "Díganme si es o no cierto", que es él quien deberá tomar las riendas del Partido, junto a otros que también se alzaron en votos como Héctor Ferrer, hijo. Decía Don Luis Muñoz Marín, y cito, "Al Partido Popular lo derrota el Partido Popular." Y esto fue lo que en parte pasó. Por lo tanto, coja oreja todo el que tuvo que ver con esta derrota y ¡SÁLGASE DEL MEDIO, NO HAGA MÁS DAÑO! Ellos saben quienes son. Algunos se quedaron en las primarias, ¡gracias a Dios! Basta ya de protagonismos miserables. Basta ya de írseles los humos a la cabeza. Basta ya de rencores y egoísmos. Abran paso a una nueva generación para que levanten, lo que ustedes derrumbaron. Permitan que el PPD se reorganice, reflexione, y surja como el Fénix de entre las cenizas que quedaron de este martes.
- Por último, a quiénes baticinaron la muerte del bipartidismo. ¡Qué equivocados están! Para bien o para mal o tal vez, para más mal que bien. ¡El bipartidismo, sigue vivo!